miércoles, 2 de octubre de 2013

Ellas y el cine quinqui



El cine quinqui era cosa de hombres. Supongo que muchas novias tuvieron que tragarse las aventuras de Toretes, Vaquillas, etc., porque sus novios se lo pedían. Y las estrellas del cine español de delincuencia juvenil de finales de los años 70 e inicios de los 80 fueron casi todas masculinas. Hablo de las películas de José Antonio de la Loma (Perros callejeros, 1977; Perros callejeros II. Busca y captura, 1979; Yo, el Vaquilla, 1985), Eloy de la Iglesia (Navajeros, 1980; Colegas, 1982; El Pico, 1983; El Pico II, 1984; La estanquera de Vallecas, 1987), así como de Maravillas (Manuel Gutiérrez Aragón, 1980), Deprisa, deprisa (Carlos Saura, 1980) o Matar al Nani (Roberto Bodegas, 1988).

 
Sus protagonistas fueron los ídolos de muchos niños, adolescentes, jóvenes y adultos de la época: José Luis Manzano, José Luis Fernández Eguía El Pirri, los hermanos Ángel Fernández Franco El Torete y Basilio Fernández Franco, José Antonio Valdelomar, etc. De ellas, actrices de alguna manera relacionada con el cine quinqui, se habla menos: Berta Socuéllamos, Berta Cabré, Andrea Albani, Sonia Martínez, Teresa Giménez, Susana Sentís. De todos ellos va esta entrada.


De estas películas salieron ídolos de final trágico (muertos por sobredosis, o como consecuencia del SIDA), cuyas desventuras abundan en la blogosfera. Sobresale entre ellos el icónico José Luis Manzano Agudo (1962-1992, muerto de sobredosis de heroína, cuyo cadáver encontró Eloy de la Iglesia y que ha dado lugar a muchas especulaciones). Este actor creció personal y profesionalmente a la sombra de Eloy de la Iglesia en Navajeros, Colegas, las dos partes de El Pico y La estanquera de Vallecas e intentó ser actor en otros proyectos, como en la serie Los pazos de Ulloa (Gonzalo Suárez, 1985). 






 
 




El otro actor quinqui más mediático fue José Luis Fernández Eguía El Pirri (1965-1988, muerte por sobredosis de heroína): sus papeles quinquis fueron en Navajeros, Maravillas, Colegas, El Pico II. Pero su carrera no está ligada sólo al cine quinqui, pues sus trabajos delante de las cámaras incluyeron ser crítico cinematográfico sui generis en el programa Querido Pirulí de Fernando García Tola (1988), así como actor de comedia en largometrajes de Fernando Trueba (Se infiel y no mires con quién, 1985) o Emilio Martínez Lázaro (El juego más divertido, 1988).





 



Tal vez tenía menos encanto, fotogenia o gracia (pero tal vez más realismo, más dramatismo) Ángel Fernández Franco El Torete (1960-1991, muerte como consecuencia del SIDA), en Perros callejeros, Perros callejeros II y Los últimos golpes de El Torete, películas en las que intervino también su hermano Basilio Fernández Franco (1963-1995), otro actor quinqui de final trágico.





 




Seguramente si Deprisa, deprisa no hubiera sido dirigida por Carlos Saura, no sería tan recordado su protagonista, José Antonio Valdelomar (1958-1992), único papel de este actor, que murió por sobredosis de heroína en la cárcel de Carabanchel.

 
 

José Antonio Valdelomar compartió protagonismo en Deprisa, deprisa con una actriz que deslumbró en el momento, Berta Socuéllamos Zarco. Su Ángela en esta película sea tal vez el mejor personaje femenino del cine quinqui (junto al que interpretó Rosario Flores en Colegas). Berta Socuéllamos tiene el encanto de haber participado sólo en esta película. Se retiró para formar una familia (como comentó Carlos Saura, se casó con otro de los actores de la película, José María Hervás Roldán Sebas El Peque). Nada de supo de ella desde entonces...

 
 
 

Berta Cabré y Andrea Albani comparten el ser actrices del cine S con incursiones en el cine quinqui. La primera, Berta Cabré (o Berta Singerman) participó en Los últimos golpes del Torete y su filmografía, además de cine S, incluye secundarios en Cambio de sexo (Vicente Aranda, 1977), Las aventuras de Zipi y Zape (Enrique Guevara, 1982) o Fanny Pelopaja (Vicente Aranda, 1984); su último papel data de 1994, en la serie Truhanes (Telecinco, 1994). Sin olvidar una película singular en el cine español: Ojossin luz (Juan Alcázar, 1988). No, no es que sea sólo una película protagoniza por El Fary, no es que sólo se editara en vídeo, sino que se realizó exclusivamente para su emisión en autobuses (¿hay más películas como estas en el cine español?). ¿Qué habrá sido de Berta Cabré?

 
 

El caso de Andrea Albani (o Eulalia Espinet Borrás) tiene, al igual que otros tantos actores de este tipo de películas, un trágico final: detenida por tráfico de drogas, murió a causa del SIDA, con 34 años (1960-1994). Para muchos, la mejor actriz del cine S, cuyos únicos papeles fuera de este tipo de cine se los ofreció Eloy de la Iglesia con su personaje Betti en las dos partes de El Pico.


La representación de la mujer en el cine quinqui se debe, sobre todo, a la película quinqui femenina, Perras callejeras, dirigida por José Antonio de la Loma en el año 1985 y protagonizada por Teresa Giménez, Susana Sentís y Sonia Martínez.




Teresa Giménez ha sido la actriz que más se prodigó en el cine quinqui, pues también participó en Perros callejeros II y Yo, el Vaquilla. Su filmografía incluye también Sinatra (Francesc Betriu, 1988), su último papel. Como Teresita La Mojada fue vedette y actriz en El Molino de Barcelona antes de saltar al cine y también fue cantante, editando varios singles a principios de los años 80. Se le pierde la vista a finales de los años 80 y parece que vive retirada por la Costa Brava.

 
 

Menos informaciones hay de Susana Sentís (o Susanna Sentís), cuya filmografía, al parecer, si IMBD no mete la pata, incluye papeles en los años 90 (en la segunda parte de Turno de oficio, 1996; no recuerdo su papel...) o ya a inicios del siglo XXI (la película Alas Rotas, Carlos Gil, 2002), si es que se trata de ella. ¿Alguien sabe algo de ella?
 

Y para el final, Sonia Martínez (1963-1994). El caso más trágico, el más conocido por todos. Sonia, de la que ya hablamos aquí, con la que muchos crecimos en la tele y que, con los años, uno va descubriendo como actriz más que solvente: luminosa cuando toca, enigmática cuando lo pide el papel. Enternece ver la ilusión con la que afrontaba su carrera en esta entrevista... Hoy en día tendría cincuenta años y seguro que seguiría en la televisión o el cine, si la mala suerte no la hubiera encontrado tan pronto y de manera tan feroz.

 
 



 


3 comentarios:

  1. Parece que Berta Cabré se dedica ahora al mundo de la naturopatía, homeopatía, etc. Tiene página web:
    http://www.bertacabre.com/

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  2. Jose Antonio Valdelomar aparece también en los créditos de otra película de Saura, EL JARDÍN DE LAS DELICIAS, de 1970, debía ser todavía un niño entonces.

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